Un poco bastante de mi
Podría realizar un texto formal y correcto, pero la filosofía de esta web es totalmente la contraría: Trading sin maquillaje, sin postureo, sin filtros y con un lenguaje normal.
Las personas que, de verdad, me conocen siempre dicen que un año de los míos equivale a varios años de su vida. Siempre me ha caracterizado la pasión por el trabajo y luchar por perseguir mis sueños, sin importar todos los problemas que me he encontrado por el camino.
Uno de los principales motivos ha sido, es y seguirá siendo mi pareja. Siempre me ha apoyado en todo, incluso en las locuras más absurdas. Ha sido el Pilar que me ha aferrado a la tierra cuando mi mente ha echado a volar.
Estoy muy orgulloso de todos los pasos de mi vida que me han llevado hasta el momento en el que me encuentro ahora: he estudiado, he trabajado sin descanso, he perdido dinero, lo he recuperado, he ganado dinero, lo he perdido, he disfrutado y lo he pasado mal, pero soy feliz.
He sido y sigo siendo autónomo por convicción y no por obligación.
Empecé a interesarme por los mercados financieros desde bien pequeño. En verano del 1998 escuché a mi padre decir que había perdido un gran capital en bolsa. Desde entonces, cada fin de semana, me revisaba el suplemento de economía de El Periódico de Catalunya, aunque no entendiera nada.
Cuando realmente me metí de lleno en los mercados de valores fue en mayo del año 2004. Abrí una cuenta de valores en Banc Sabadell y compré acciones de Telepizza y del Banc Sabadell, abriendo una cuenta remunerada adicional donde se ingresaban los dividendos que el Banc Sabadell ofrecía.
En el año 2005, gracias a un amigo y a compañeros de universidad, me metí de lleno en productos apalancados: derivados, cfds, futuros y opciones.
La crisis del 2008 nos afectó de una manera muy severa, los negocios de mi familia quebraron, nuestra tienda tuvo que cerrar y el piso que con tanta ilusión habíamos adquirido fue embargado. Fue tal el impacto emocional que me prometí a mi mismo que no me podría volver a pasar una cosa así, y por ello dediqué todo mi tiempo libre a entender que había pasado y como evitar que ello me volviera a afectar en el futuro.
Entre los años 2008 y 2010 luchamos sin descanso para salir de aquella situación y, en el año 2011, por fin, levantamos cabeza.
Desde el año 2012 me he dedicado, de manera directa o indirecta, a los mercados financieros combinado con mi actividad laboral normal. Y desde el año 2017 me dedico en cuerpo y alma a gestionar el capital familiar y sacarle un rendimiento que ningún producto financiero me proporciona.
Yo no soy un experto en mercados financieros, no soy un gurú del trading, ni tengo una bola de cristal que me diga hacía donde se moverán los mercados.
Me dedico a analizar la actualidad para diseñar estrategias de inversión para posibles escenarios que puedan suceder.
He ido a muchos eventos de Trading, he asistido a un sinfín de seminarios web de distintos Traders y Brokers, pero no he conseguido mucho de ellos. Al final entendí que lo mejor es encontrar a alguna persona que te guie un poco y combinar la teoría con la práctica y APRENDER.
Durante los años de experiencia he aprendido que, además de analizar e interpretar gráficos, hay que tener un plan riguroso de ejecución de operaciones y otro plan de que hacer en cada escenario. Solo así he podido realizar Trading durante todos estos años siendo consistente.
Durante todos estos años he aprendido que la mejor inversión que puedes hacer es invertir en ti mismo: adquirir conocimientos, experiencia, dominar tus emociones, disciplina, estrategias y diseñar y ejecutar un plan de trading y ahorro completo.
Cada operación, cada pérdida, cada stop que se alcanza, cada take profit, cada análisis ha dado más consistencia a mis operaciones.
Es muy importante saber que, en el Trading, la línea que separa al jugador del profesional es muy delgada.